"TERCIOPELO ROJO"
Hoy voy a escribir sobre los cupcakes que he realizado tanto para Nochebuena como para Nochevieja, como he cenado en distintos sitios... pues se podía repetir, jeje
Este es (al menos por ahora) mi receta de cupcakes favorita y es ideal tanto para Navidad como para San Valentín debido a su color rojo intenso. Además, la deliciosa y esponjosa textura de su bizcocho, nos recuerda al amor más dulce, junto a su jugosa crema de queso, Mmmm, para chuparse los dedos...
El origen de este pastel esta rodeado de misterio y de muuuchas leyendas, parece ser una especialidad americana típicamente sureña, aunque otros creen que viene de Canadá, pero los relatos populares cuentan uan historia muy peculiar, en la década de los veinte, el hotel Waldorf Astoria de Nueva York era conocido por este placentero postre, y una mujer que quedó encantada con el sabor pidió por correo la receta. El hotel tuvo la cortesía de mandarle la información aunada a una factura por cobrar con una cuantiosa suma por la receta recibida. La mujer, furiosa por el cobro de la receta, decidió divulgarla a todos sus conocidos. A partir de entonces la receta ha circulado por la Norteamérica anglosajona por décadas. Y hemos tenido suerte de que haya llegado aquí aunque haya tardado...
Lo más importante del Red Velvet es conseguir su característico color rojo intenso, para eso es importantel usar colorante en pasta y no el colorante líquido que se consigue en cualquier supermercado. Yo he usado el de Wilton y me ha quedado bastante rojo, aunque recomiendan sobretodo el extra red de Sugarflair. Originalmente no llevaba colorante y se dice que el vinagre y el buttermilk (en este caso he usado leche con limón) daban un tono ligeramente rojizo al cacao, aunque también se dice que usaban remolacha hervida para darles ese tono rojizo tan característico, a saber... pero el caso es que la receta que hay ahora está buenísima!!
RECETA
Para el bizcocho:
- 60ml de aceite de oliva
- 160gr de azúcar
- 1 huevo
- 1 cucharada de cacao
- 1,5 cucharaditas de colorante en pasta
- 1,5 cucharaditas de aroma de vainilla
- 125ml de leche desnatada
- 1 cucharadita de zumo de limón
- 150gr de harina
- 0,5 cucharadita de bicarbonato sódico
- 1 cucharadita de vinagre blanco
En primer lugar hay que poner la leche en un vaso y añadir el zumo de limón, para dejarlo reposar unos 5 o 10 min.
En un bol, batimos el azúcar con el aceite, después añadimos el huevo y el extracto de vainilla.
En otro bol, tamizamos la harina con el cacao, y lo vamos añadiendo poco a poco a la mezcla anterior, batiendo a velocidad baja y alternándolo con la leche. Después en un vasito, disolvemos el vinagre con el bicarbonato sódico, y cuando haga burbujas lo echamos a la mezcla.
Ya solo nos queda agregar el colorante, con un poco nada más se pone rojo pasión!!!
Repartimos la mezcla en las cápsulas de papel y horneamos durante 22 min a 180º (debía de estar previamente precalentado). Cuando acabe, los pinchamos con un palito y si sale limpio es que están listos!
Así que procedemos a sacarlos del horno y dejarlos reposar 5 min en la misma bandeja, despúes los pasamos a una rejilla para que se enfríen por completo.
Para la crema de queso:
- 120gr mantequilla
- 300gr icing sugar
- 125gr queso cremoso de untar
- 1 cucharada de leche desnatada
Para empezar tamizamos el icing sugar (para que esté más fino todavía de lo que ya es), y lo vamos batiendo con la mantequilla con cuidado de que salta mucho, se le puede poner un trapo húmedo por encima pero yo lo que hago es que tapo el bol con film y le hago un agujero en medio para meter las barillas, cuando se integre añadimos el queso (frío), y batimos primero a velocidad baja durante 1 min y a velocidad alta durante 5 min más. Cuanto más batamos mayor consistencia tendrá la crema, ha diferencia de la buttercream, esta tenemos que conservarla en frío.
Para rematarlo, podemos terminar la decoración con miguitas de masa espolvereadas por encima y unas cuantas bolas plateadas comestibles, super bonito y elegante!
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